La hipoteca vitalicia es una fórmula financiera que permite a los propietarios de una vivienda obtener liquidez sin tener que renunciar a su uso y disfrute. Se basa en la venta de la nuda propiedad del inmueble, mientras que el propietario conserva el usufructo vitalicio, es decir, el derecho a seguir viviendo en su casa de por vida.
De este modo, el propietario recibe una renta mensual garantizada, asegurando su bienestar económico sin perder la tranquilidad de seguir residiendo en su hogar.
Este sistema ofrece múltiples beneficios tanto a nivel financiero como personal:
transforma el valor de tu vivienda en ingresos estables.
mantienes el usufructo y puedes seguir viviendo en tu casa el tiempo que desees.
te liberas de determinados pagos y cargas relacionados con la vivienda.
dispones de liquidez sin tener que vender completamente tu propiedad.
la operación se realiza mediante escritura pública ante notario.
Analizamos tu situación y valoramos tu vivienda para determinar la renta vitalicia más adecuada.
Te presentamos una oferta clara, justa y adaptada al mercado, con todas las condiciones explicadas desde el inicio.
Formalizamos la operación mediante escritura pública, garantizando la máxima seguridad legal.
Recibirás puntualmente tu renta vitalicia, asegurando ingresos estables de por vida sin renunciar a tu hogar.